A pesar de estar prevista en la Ordenanza municipal de arbolado urbano, la falta de vigilancia y sanción por parte de los servicios municipales fomenta su incumplimiento generalizado por las empresas constructoras.
Las heridas en el tronco, ramas y raíces a menudo causan importantes daños estructurales, graves infecciones o ataque de plagas, y finalmente la muerte del ejemplar, a menudo meses o años después de finalizarse las obras, por lo que raramente se establece una relación causa efecto y se sanciona al infractor.
Las heridas pueden provocar la muerte de ramas o resquebrajamiento del árbol, con el consiguiente peligro de roturas y caídas sobre peatones y vehículos. La poda, tratamiento posterior, o finalmente la tala, eliminación y sustitución de los árboles tiene un elevado coste para el presupuesto del ayuntamiento que raramente es repercutido en los responsables del daño ocasionado.
La Policía Municipal debería actuar denunciando a aquellos contratistas o servicios que incumplen esta ordenanza, para evitar daños al patrimonio vivo y perjuicios económicos a las arcas municipales.
Otras noticias relacionadas:
No hay comentarios:
Publicar un comentario